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sábado, 6 de octubre de 2007

Designación como "Centro de Día"

Al pelear y trabajar por una comunidad organizada, sin pobres ni explotadores, al soñar con una Latinoamerica unida en el ALBA; vamos cruzándonos con dificultades, pero también con grandes oportunidades. Son pequeños logros que conseguimos siendo parte de la confrontación de dos propuestas de país, una pelea que arrancó con la guerra de independencia y en la que participamos todos.

Hoy nos toca aceptar un desafío. ¿De que sirve tanto conflicto y esfuerzo si renunciamos a las pequeñas victorias que vamos obteniendo? El Taller de Oficios "Simón Rodríguez" recientemente fue designado como "Centro de Día" (*) por el Ministerio de Desarrollo Humano de la Provincia de Buenos Aires. El Estado, donde hay tantos engranajes controlados por el infierno, acepta que una organización popular sea parte activa en la búsqueda de solución para los conflictos que la dependencia y el neoliberalismo genera en nuestros pibes.

Aceptamos que el Estado fortalezca nuestra construcción. Pero no cedemos ni confiamos, "ni un tantito así". Si hoy atendemos las "emergencias" y curamos los desastres que generó la exclusión es porque lo consideramos el primer paso, el lugar donde entre todos hacemos pie para construir un nuevo país, que tiene formas y colores bien definidos: Unidades de producción comunitarias, recursos naturales nacionalizados en manos de nuestro Estado, democracia participativa, vacaciones para todas y todos, equitativa distribución del ingreso, educación para la liberación... El camino es largo, tal vez larguisimo, y vamos aprovechando cada vientito a favor.

(*) Convenio: "...La institución tiene por objeto dar una respuesta alternativa al niño y adolecente en situación de calle, comprometiéndose a asegurarle la protección y cuidado que sean necesarios para su bienestar..."

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicitaciones compañeros, por la lucha que estan llevando en contra del neoliberalismo y la dependencia, como bien señalan ustedes. Han querido destruir a un pueblo trabajador y digno, nos han hecho creer tantas pavadas, pero nunca lograron que dejaramos de creer en nosotros, nuestro pueblo, el conjunto humano donde nos sentimos unidos, fuertes e invencibles. Es por eso y por la historica lucha de ese pueblo argentino contra de las diversas formas de imperialismo, que hoy nos ponemos de pie para vencer las dificultades, avanzando con lucidez, dignidad y compromiso. Adelante, ni un paso atrás y ¡¡hasta al victoria siempre!!
Gustavo.